Semanas después, un mensajero dejó un sobre acolchado sobre la mesa de Helen. Dentro estaba el informe oficial de la Oficina Geológica, grabado en plata: Descubrimiento Ward Verificado. El prefacio decía: «Agradeciendo al Dr. Caleb Ward y a la doctora Helen Sloane por la recuperación y confirmación» Rastreó las letras lentamente, sintiendo lo mucho que contenían.
Esa tarde visitó el ala de rehabilitación. Rachel ya estaba allí, arreglando tulipanes junto a la cama de Caleb. Había recuperado el color; sus ojos seguían cada movimiento con tranquila diversión. Cuando Helen entró, sonrió débilmente. «Dos caras conocidas», dijo. «Doctor y Ray: mis polos norte y sur»
