La niñera oye ruidos en el piso de arriba, así que el padre comprueba la cámara oculta y capta una pesadilla en su cocina

A última hora de la tarde, la casa había quedado en una quietud casi excesiva. Tommy dormitaba en el sofá bajo su manta de dinosaurio y Kayla aprovechaba el tiempo para ordenar la cocina, pues quería que todo estuviera perfecto cuando regresaran los padres. Era su primer turno de canguro y estaba decidida a causar una buena impresión.

Alcanzó una taza cerca del fregadero cuando algo tenue llamó su atención, un sonido casi imperceptible procedente del piso de arriba. Un golpe suave. No era fuerte ni alarmante, pero sí lo suficiente para hacerla mirar hacia el techo.