Este hombre se hartó de patear asientos pero cuando se da la vuelta descubre un giro inesperado

Kevin exhaló un suspiro lento y aliviado, sintiendo que el peligro inmediato había pasado. Sus hombros se relajaron y el nudo que tenía en el estómago empezó a desaparecer. La terrible experiencia había terminado con el chico convirtiéndose en un héroe, y su valentía y rapidez mental habían salvado el día.

Una pequeña sonrisa de alivio se dibujó en su rostro, sustituyendo el miedo anterior por una tranquila gratitud. Kevin lo miró, reconociendo en silencio el vínculo que compartían. Cuando el avión comenzó a descender, Kevin sintió una oleada de alivio mezclada con una persistente inquietud.