El marido no explica el extraño olor de sus manos hasta que su mujer descubre el secreto

Connor también estaba incluido. «Hacen falta dos», le había dicho el médico, entregándole una guía a juego. Su versión significaba dejar de trasnochar, dejar de fumar y reducir el estrés. Julia había compartido una vez ese hábito, hasta que el deseo de ser madre le hizo perderlo. Esperaba que Connor igualara esa intensidad.

Él prometió que lo haría. Aceptó, leyó la lista y asintió durante la visita al médico. Julia le creyó. ¿Por qué no iba a hacerlo? Estaban juntos en esto, o eso creía ella. Pero una noche, esa creencia se hizo añicos en un momento único e innegable.