Una mujer se encuentra con un oso durante sus vacaciones: lo que ocurrió a continuación te romperá el corazón

Los dos prosperaban gracias al impulso, seguros de que el futuro seguiría acelerándose a su favor. Pero el impulso tiene dos caras. La nueva empresa de Lucas tuvo problemas de liquidez, lo que le obligó a trabajar sesenta horas a la semana y a recibir llamadas de inversores a las dos de la madrugada que le dejaron agotado.

Al mismo tiempo, la agencia de Tessa consiguió una cuenta nacional de bebidas deportivas que exigía viajar casi constantemente. Las cenas perdidas se convirtieron en mensajes de texto recortados; los mensajes de texto recortados se convirtieron en enfrentamientos sobre prioridades. La chispa final saltó cuando Lucas descubrió en un blog del sector una foto de Tessa en el bar de un hotel riéndose junto a un colega.